El número de quiebras de personas supera por vez primera al de empresas
El desarrollo de la Ley de Segunda Oportunidad, el aumento exponencial de los créditos personales, tarjetas de crédito, microcréditos, entre otros y la desaceleración económica están motivando un incremento inédito en toda España del número de concursos de acreedores de personas físicas (empresarios y consumidores a nivel particular). Por vez primera en España se está registrando un mayor número de concursos de acreedores de personas físicas declarados que de empresas (personas jurídicas).
- El Boletín Oficial del Estado publicó el jueves anuncios de declaración de concursos de acreedores de 32 personas físicas, y 20 de empresas. También el viernes el BOE publicó 15 concursos de personas y 9 de empresas. Nunca antes había ocurrido algo así.
- La reforma de la Ley Concursal en 2015 y el desarrollo del procedimiento de la Ley de la Segunda Oportunidad explican este cambio de tendencia, inédito en el país. Otros factores como el incremento de los créditos y tarjetas de consumo que ofrecen las entidades financieras y entidades de microcréditos con elevados intereses, que dejan entrampados a una parte elevada de su clientela, o la desaceleración económica, están también detrás de este incremento del número de concursos de personas físicas (empresarios y consumidores).
«La mayoría de los nuevos concursos de acreedores de personas físicas afectan tanto a autónomos como a consumidores», indica Juan Martínez-Medina, Socio y presidente de Ecónomo & Iuris Consulting «Es la consecuencia de la desaceleración económica y de un cambio de gobierno que no deja a nadie tranquila dando como resultado una crisis de consumo». Juan Martínez-Medina explica que el desarrollo de la Ley de Segunda Oportunidad, incluyendo a hacienda pública (un porcentaje importante de la deuda) después de la sentencia del TS del pasado 2 julio de 2019, ha impulsado el número de concursos de acreedores de personas.
Reforma Ley Concursal
La reforma de la Ley Concursal a través del Real Decreto-Ley 1/2015, de 27 de febrero, modificado a su vez por la Ley 25/2015, de 28 de julio, estableció el marco normativo definitivo de la segunda oportunidad. El mecanismo de segunda oportunidad para particulares (empresarios y consumidores) permite la posibilidad a los deudores de buena fe, que sean empresarios o consumidores, de quedar liberados de las deudas que no puedan pagar incluyendo el crédito público.
En determinados supuestos, señala Juan Martínez-Medina, el deudor puede acogiéndose a la Ley de la segunda oportunidad mantener su vivienda, lo que antes de la reforma concursal era impensable.«La ley debería ser más clara en cuanto al activo de la vivienda en el proceso concursal de persona física, pero en la práctica se están dando estos casos en los que los jueces permiten que no se pierda», señala.
Juan Martínez-Medina considera que la divulgación de la ley de la segunda oportunidad explica la subida del número de concursos de acreedores de personas físicas. «La gente está perdiendo el miedo ahora a acudir al juzgado», cree.
Créditos fáciles
Álvaro Martínez-Medina, socio de Economo & Iuris Consulting, apunta que en el caso de la Ley de la segunda oportunidad se establece como requisito que los deudores traten de alcanzar un Acuerdo Extrajudicial de Pagos con los acreedores, y que el hecho de intentarlo les permite acogerse a esta herramienta y mostrar su buena fe.
«El número de concursos de personas físicas va a crecer todavía mucho más», considera Álvaro Martínez-Medina, Socio de Economo & Iuris Conmsulting
«Creo que el número de concursos de personas físicas va a crecer todavía mucho más», comenta Juan Martínez-Medina, administrador concursal y presidente de Economo & Iuris Consulting, un despacho especializado en Derecho concursal y en la Ley de la 2º Oportunidad.
Juan Martínez-Medina destaca como la razón principal de este incremento el desarrollo y conocimiento de la ley de segunda oportunidad. Pero apunta también al ascenso de casos de personas que lo pierden todo tras caer en una espiral de contratación de créditos fáciles al consumo que exigen el pago de elevados intereses. «He llegado a administrar el concurso de una persona que tenía como acreedores a 15 empresas de créditos fáciles», comenta.
La Ley de la 2º Oportunidad ya no solo es beneficiosa para los deudores sin propiedades, si no que pueden beneficiarse todos aquellos que están en la actualidad en una situación de insolvencia. Otro de los temas más interesantes en la actualidad es la posibilidad de exoneración de gran parte de la deuda pública.